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Niños de Ecatepec convierten unicel y cáscara de coco en madera; reciben apoyo del alcalde para viajar a Chile

  • Los menores participarán en el Festival de las Ciencias de Chile, con apoyo del gobierno municipal

Karla y Emiliano son hermanos, tienen 9 y 11 años de edad, respectivamente, y son originarios de Ecatepec.

Preocupados por la tala desmedida de árboles, y asesorados por su padre, crearon  un sustituto de madera utilizando cáscaras de coco y deshechos de unicel, el cual resultó ser resistente, versátil y económico. 

Este material fue nombrado por ellos como Refina,  que significa Reciclado de Fibras Naturales; aunque originalmente surgió como un proyecto personal,  los menores tuvieron la oportunidad de inscribir su creación en el Proyecto Multimedia Ciencia y Tecnología de la Sociedad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (Solacyt), en el cual fueron reconocidos con el primer lugar y obtuvieron la oportunidad de presentar el sustituto en el Festival de las Ciencias de Chile, que  se llevará a cabo el próximo 28 de noviembre.

“Nos interesa mucho salvar el planeta, para que ya no talen más árboles”, asegura Emiliano, mientras relata la historia de cómo nació la idea de Refina:

“Fuimos a una boda en Acapulco y entonces vimos unos cerros llenos de cocos, y le dijimos a mi papá, ‘¿qué podemos hacer con estos cocos?’ A partir de ahí nos dedicamos a investigar e investigar hasta que logramos crear el sustituto de la madera”, dice el infante. 

La boda fue en mayo de 2018. Seis meses después Karla y Emiliano tenían lista la primera versión de su proyecto. Para lograrlo, solicitaron el apoyo de un vendedor de cocos cercanos a su domicilio, en Jardines de Santa Clara. El comerciante aceptó brindarles la cantidad de cáscaras que necesitaran, pues él tiene que pagar entre 5 y 10 pesos para que el camión de la basura se lleve un costal lleno de este desperdicio. 

Al final, lograron producir el sustituto a base de cáscaras de coco trituradas,  mezcladas con desechos de unicel tratados químicamente. 

 El material que obtuvieron resultó ser igual de resistente que la madera convencional, además de ser impermeable y más manipulable. 

Tras tener listo su proyecto, uno de sus profesores del Centro Educativo Ecológico Mexicano, ubicado en la colonia Ciudad Azteca, los invitó a presentarlo en una competencia de la  Solacyt. Entusiasmados lo hicieron y concursaron en febrero de este año en Toluca, donde obtuvieron el primer lugar y un pase al Festival de las Ciencias 2019, que tendrá lugar en la ciudad de Antofagasta, Chile. 

“Estamos muy emocionados y nerviosos. En la escuela algunos de mis compañeros me dicen ‘que padre proyecto’, pero a la mayoría no le interesa. Eso no me desanima… porque es importante que protejamos nuestro planeta, porque es el único lugar donde vivimos”, añade Karla.

Bajo el lema “Salva un árbol, salva el planeta, ¡recicla!”, los hermanos García buscan triunfar en Chile y en México. Junto con sus padres,  Catarino García Torales y Elianeth Nayeli Ramírez Ortiz, tienen la intención de patentar y posteriormente popularizar la producción de Refina para disminuir el consumo de madera en el país, pues es un problema ambiental de grandes dimensiones.

Fernando Vilchis Contreras, presidente municipal de Ecatepec, se reunió con los niños científicos y sus padres para hablar sobre el proyecto. Ante el alcalde, los niños compartieron que el principal obstáculo al que se enfrentan es la falta de recursos, por lo que acordaron acudir ante el cabildo de Ecatepec a presentar su iniciativa y solicitar apoyo. 

De acuerdo con un estudio realizado en 2018 por  la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en nuestro país al menos 70% de la madera utilizada es de origen ilegal. Tan solo los decomisos hechos por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, (Profepa) alcanzan apenas 30 mil metros cúbicos de madera, respecto a los 14 millones que se extraen clandestinamente de los bosques mexicanos.